Corría el minuto 28 de la primera parte, cuando Leo Messi se armó de coraje y se inventó la jugada del partido. No por la belleza del gol, sino por lo que este supuso para el devenir del encuentro. Con el gol de Alexis el Barcelona se llenó de confianza y el chispazo de Messi en el minuto 28 fue decisivo para la victoria blaugrana.
Después de la jugada y el gol de Alexis el Real Madrid pudo ponerse por delante de nuevo, pero no estuvo acertado de cara a puerta y fue en el minuto 52 y 65 cuando Xavi y Cesc respectivamente sentenciaron el partido y consiguieron los tres puntos para el equipo de Pep Guardiola.
Es por lo tanto esta la jugada que marco un Clásico en el que el fútbol fue el protagonista principal, y no las tanganas y los rifirrafes entre los dos equipos, como anteriormente había ocurrido.
Antonio Redondo. Twitter: @andoniny @extratimeweb
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